Perfecta conjunción entre la pintura, la música y ese siempre genial Luis Alberto de Cuenca. Te felicito, Carla, por tu sensibilidad y tu amor al arte. Un beso.
Este Luis Alberto de Cuenca un día nos mata pero en serio. Este poema con esa bailarina en rojo y sus ojos perfilados, ¡y la zapatilla desatada! Ya está bien de remover emovciones ¿o no? Ja, ja, es broma. Gracias por este regalo increíble que sacude hasta las vísceras. Eres para beberte, querida.
Sabes elegir bien los poemas para tus post y este de Luis Alberto de Cuenca, bien ilustrado, lo demuestra. Ponte las zapatillas de ensayo y como ya te diste una vuelta por mi blog, pues aqui lo reflejaste, vuelve para ponerme unas palabras, que mi vanidad las necesita Besos
Y si algun dia quieres hablar de ballet, de lo que conozco bastante a través de mi amistad en Bruselas con Maurice Bejart, así como con sus primeros bailarines de entonces Victor Ullate y Jorge Donn, escribeme a mi email, que figura en el blgo, y te contestaré tambien por email. Besos
Desbordando elegancia, dulzura y pasión ,bonita combinación de palabras formas y color . Visitar este rincón siempre me reconforta porque aquí encuentro arte ,sensibilidad y magia en la expresión.
Me gustó.. decirlo al oído.. siempre
ResponderEliminarCon un abrazo grande
Y mis
Saludos fraternos de siempre..
Que bello poema, bebérsela para asi calmar la sed de deseo.
ResponderEliminarLa chica de la pintura, preciosa, como para bebérsela de un trago.
Perfecta conjunción entre la pintura, la música y ese siempre genial Luis Alberto de Cuenca.
ResponderEliminarTe felicito, Carla, por tu sensibilidad y tu amor al arte.
Un beso.
Bello el poema ,maravillosa pintura.
ResponderEliminarLa música ayuda a que todo este espacio
sea un placer para los sentidos.
Tanta belleza junta emociona.
Agradezco tu comentario,en mi expo virtual.
Ahora ,te seguiré como agmiradora de un espacio
de arte que es un lujo.
Te saludo y agradezco,desde Argentina ,Liliana.
Este Luis Alberto de Cuenca un día nos mata pero en serio.
ResponderEliminarEste poema con esa bailarina en rojo y sus ojos perfilados, ¡y la zapatilla desatada! Ya está bien de remover emovciones ¿o no?
Ja, ja, es broma. Gracias por este regalo increíble que sacude hasta las vísceras. Eres para beberte, querida.
Besazos.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarSabes elegir bien los poemas para tus post y este de Luis Alberto de Cuenca, bien ilustrado, lo demuestra.
ResponderEliminarPonte las zapatillas de ensayo y como ya te diste una vuelta por mi blog, pues aqui lo reflejaste, vuelve para ponerme unas palabras, que mi vanidad las necesita
Besos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarY si algun dia quieres hablar de ballet, de lo que conozco bastante a través de mi amistad en Bruselas con Maurice Bejart, así como con sus primeros bailarines de entonces Victor Ullate y Jorge Donn, escribeme a mi email, que figura en el blgo, y te contestaré tambien por email.
ResponderEliminarBesos
Bellisimo poema, "no esperes un segundo , bebetela..."
ResponderEliminarPrecioso, un abrazo.
Tremendo este poeta, uno de mis favoritos.. es tan.. tremendo!! jaja
ResponderEliminarFascinante la pintura!!
Besos
Gracias a tod@s de corazón!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarDesbordando elegancia, dulzura y pasión ,bonita combinación de palabras formas y color .
ResponderEliminarVisitar este rincón siempre me reconforta porque aquí encuentro arte ,sensibilidad y magia en la expresión.