Alexander SheverskyUn día volveré a tus ojos
y comenzaré de nuevo
volveré con un sonido hueco de metal
y sol mojado
buscaré entre los papeles del tiempo
tu cuerpo verde y tus cabellos de uva
te coronaré en silencio con mi boca
y con mis manos que no terminan
Volveré por ti y por tu sangre estrellada
viendo pasar la tarde como una sombra antigua
algo se romperá allá arriba y no seremos nosotros
algo se quemará de pronto con el eco de tus sábanas
Y volveré más vivo, más puro, más hambriento
y volveré volando y desgarrando plumas
todo lo haré por ti, todo en silencio
que hasta los gallos prolongarán la noche
cuando te vean desnuda.
- Mario Meléndez
3 comentarios:
Hace bastante tiempo que no pasaba por aquí, y hoy me encuentro con este bello poema de amor de Mario Meléndez; preciosas sus metáforas: tu cuerpo verde y cabellos de uva, tu sangre estrellada... Genial también el post anterior, con los versos de Gonzalo Rojas. Pues nada, un placer visitarte y poder saludarte. Besos.
Volver y robar al tiempo instantes no vividos pero siempre recordados es la lucha más importante en la que debe participar un amante.
Poder materializar los sueños no realizados es imprescindible para constatar su victoria.
Es un poema excelente.
Precioso poema de largas ausencias y soledades. No sé si luego puede recuperarse, aunque es bueno poder volver al lugar de donde uno nunca debió marcharse.
Querida Carla, un fuerte abrazo y mil gracias por ofrecernos este remanso de paz.
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